A pesar de las dificultades vividas en 2021 hay buenas cosas que destacar. Este año tiene nuevas oportunidades.

Es 2021, un año que ha quedado marcado en la memoria de todos. Si bien para muchos no ha sido el mejor año de sus vidas, si ha dejado una huella imborrable.

Una pandemia inimaginable en nuestros días, miles de personas perdieron la batalla ante un virus hasta hace poco tiempo desconocido, el SARS-CoV-2. El Covid-19.

Sillas vacías y corazones destrozados en todo el mundo.

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Por fortuna no todo fue una desgracia. A pesar de esas pérdidas las personas pudieron sacar esa humanidad que hay en ellos.

Encontraron la manera de comunicarse de manera virtual. Celebraciones, aniversarios, nacimientos, las reuniones casuales estuvieron presentes sin importar que los abrazos y besos cordiales se hayan esfumado como efecto del distanciamiento social.

Encontrar a un amigo en el supermercado se convirtió quizá en el hecho más relevante de la semana. Se aprendió a valorar esos pequeños privilegios que se daban por sentado.

Sin duda, 2021 les enseñó a valorar lo mucho que tienen. Que la salud es lo más preciado y tener a la familia unida son de un valor incalculable, algo que no se compra y por lo que darías todo lo que posees con tal de que estén junto a ti.

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Gracias 2021 por abrirle los ojos a la humanidad, por esas pequeñas muestras de que el mundo todavía tiene mucho para dar.

Esas enseñanzas quedan anidadas en miles de corazones, pero a su vez permite recibir al 2022 con toda la esperanza de que sea un año mejor.

Muchas personas vieron frustrados sus sueños, pero ahora con un gran porcentaje de la población vacunada brilla una luz de esperanza. Se retomarán esos sueños de progreso ante la nueva posibilidad que se les está brindando.

De seguro este es un año en donde se encontrará la manera de controlar la pandemia, en donde miles de personas ganarán la batalla contra el Covid-19.

2022 ha sido recibido por todos con una visión de progreso, sabiendo que, aunque la vida puede ser efímera se debe de hacer todo el esfuerzo por lograr vivir de la mejor manera.

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Agradeciendo cada día por los privilegios que se tienen, por tener la fortuna de poder respirar un aire más limpio.

Gracias al confinamiento social el planeta recibió un descanso. Ahora se pueden observar las playas más limpias, los ríos fluyen sin obstáculos, los animales han retomado su lugar en la naturaleza, se les puede ver en su hábitat sin tener que esconderse de las personas que deambulan por ahí.

Es un nuevo año, llega con nuevas metas, con bríos renovados, las personas están descansadas y con el deseo de progresar.

Sus mentes están enfocadas; pues tuvieron mucho tiempo para analizar y valorar lo que tienen y descubrieron lo que de verdad importa para luchar.

Ahora le dan un verdadero valor a las cosas que realmente importan en la vida, la salud, la familia, el empleo, los ingresos que reciben, tener un ahorro, salir de vacaciones.

Esas cosas que la gente comúnmente no hace y que justamente descubrieron que es lo que más anhelan en sus corazones.

Sin duda, a la primera oportunidad harán eso que durante tanto tiempo postergaron por “falta de tiempo”, hacer ejercicio, viajar, bajar de peso, ir a visitar a un familiar.

Las personas que murieron dejan grandes enseñanzas y un vacío imposible de llenar. El respeto que se le debe de tener a la pandemia y sus cuidados.

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A todos los que tuvieron una pérdida ahora tienen la oportunidad de fortalecer sus lazos familiares con quienes siguen formando parte de sus vidas.

Que sea un tributo de lucha para los que ya no están y que sus muertes no queden como un dato más en la estadística.

Que sea un ejemplo, un impulso y poder cumplir sus propios sueños.

¡Bienvenido 2022!. Estás en tiempo de pensar, planear y desarrollar para que sea el mejor año de tu vida.