La historia de Saúl, el tapicero que transformó un sillón viejo en un nuevo comienzo en Culiacán
José Saúl convirtió un sillón viejo en el inicio de Tapicería Empire en Culiacán, un taller donde cada puntada cuenta una historia de esfuerzo, arte y perseverancia


La Tapicería Empire (Imperio), ubicada en la colonia Las Cucas, es más que un negocio: es el reflejo de la perseverancia, la creatividad y el espíritu emprendedor de José Saúl Rodríguez Sánchez, un tapicero de 35 años que ha hecho del oficio su forma de vida y de resistencia.
Hace apenas dos años y tres meses, José Saúl decidió apostar por sí mismo y abrir su primer taller a unos metros de la Obregón. El primer sillón que tapizó fue el de su casa. Sin letrero, sin clientela, solo con una mesa improvisada en la banqueta y las ganas de salir adelante.

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“Saqué una mesita, me puse a trabajar ahí, sin letrero, sin nada. Poco a poco fui dándole forma, y a la semana ya había mandado a hacer la rotulación”, recuerda sobre sus inicios en el taller, en entrevista para Tus Buenas Noticias.
Un emprendimiento complejo, pero satisfactorio
El camino no ha sido sencillo. La clientela tardó en llegar, y en más de una ocasión se ha enfrentado a semanas enteras sin trabajo.
“Han pasado hasta 20 días sin que caiga ningún cliente. Y uno se queda en ceros, pensando si cerrar o seguirle buscando”, confiesa.
Antes de emprender, José Saúl trabajaba como conductor de Uber por las tardes y como aprendiz de tapicero por las mañanas. Fue un compadre quien lo introdujo al oficio, y desde entonces, las herramientas, las telas y las estructuras se volvieron parte de su día a día.
“Siempre me gustaron las manualidades”, cuenta con una sonrisa tímida, pero orgullosa, una habilidad que lo ha convertido en un tapicero muy creativo.
La clave es ser curioso y creativo
Tapicería Empire se distingue por su versatilidad: no solo repara y retapiza muebles, también diseña y fabrica a la medida, reestructura y modifica. Desde sofás cama hasta mobiliario para negocios locales o el revestimiento de un vehículo.
Además, Saúl se mantiene actualizado a través de opciones como Pinterest y redes sociales, buscando siempre ofrecer diseños nuevos y personalizados. “Eso es lo que te distingue: qué tan curioso y creativo eres”, afirma.
El negocio ha sobrevivido gracias a la calidad del trabajo, la recomendación boca a boca y la constancia. “Nos esmeramos para que cada trabajo salga lo mejor posible”, señala.
Hoy, la clientela lo busca desde colonias como Las Quintas, Barrancos y Alturas del Sur. Y aunque hace unos días tuvo que modificar su esquema de trabajo, los clientes lo pueden contactar vía WhatsApp al 6672356708.
“¿Qué me mantiene en esto? Las ganas de salir adelante y el gusto por lo que hago”, dice. Y en esa frase sencilla, cabe toda una historia de lucha, talento y orgullo artesanal.
Los buenos oficios dignifican al trabajo honesto.